La vidriera de la Academia de Infantería de Toledo “se salva” de la Memoria Histórica


El Ministerio de Defensa, liderado por Carmen Chacón, ha decidido dejar la vidriera que preside el comedor de gala de la Academia de Infantería de Toledo, a pesar de toda la polémica creada en torno a la Ley de la Memoria Histórica durante los últimos meses. El Águila de San Juan figura en la vidriera de forma notable por lo que este símbolo era el motivo de la polémica. Un símbolo que se remonta a la época de los Reyes Católicos y que fue el escudo oficial de nuestro país hasta 1982. Tras las primeras intenciones del departamento de Chacón para eliminar este escudo preconstitucional -intervención que vendría a costar 250.000 eurosfinalmente esta semana hemos conocido que el Ministerio de Defensa no actuará en esta vidriera del comedor de gala de la Academia de Infantería atendiendo al valor artístico de la pieza. El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, a preguntas sobre este tema, consideró que esta vidriera nunca ha sido utilizada como un elemento “de agresividad” ni tampoco como un elmento de “adoración” al antiguo régimen por lo que consideró que “lo que ahí se ve con normalidad y aprecio estético tiene que valorarse desde esa perspectiva”.


De este modo, el primer edil capitalino afirmó que la decisión tomarada por el Ministerio de Defensa “será saludada por la inmensa mayoría de la gente que está relacionada con la Academia”. Una decisión que coincide con la celebración de la Inmaculada, patrona de la Academia de Infantería por lo que García-Page deseó a todos ellos que celebren esta decisiñon “sabiendo que está la ciudad de Toledo arropándoles como siempre”, finalizó.
COMPENSAR EL PROTAGONISMO
No obstante, para “compensar” el efecto de la vidriera y eliminar todo rasgo franquista en la sala, el Ministerio de Defensa ha decidido que colocará una serie de objetios constitucionales para que el escudo protagonista de la vidriera deje, precisamente, de serlo. Aprobada la Ley de la Memoria Histórica, el Ministerio de Defensa inició un catálogo detallado con todos los elementos preconstitucionales que existían en sus instalaciones, con el fin de irlos retirando progresivamente. De más de 300 objetos franquistas, veinte permanecerán en su sitio tras certificar los órganos de Cultura pertinente que tienen valor artístico, como es el caso de la vidriera de la Academia de Infantería de Toledo.

-Fuente: El Día de Toledo. Informa SANDRA RUFIANGEL

1 comentario:

L. de Guereñu Polán dijo...

Pues no debiera. Hay un pueblo cerca de Ciudad Rodrigo (Salamanca) que se sigue llamando Águeda del Caudillo. Debe de haber más casos.